Luz :
Coloca en un lugar con buena luz. Hojas marrones quiere decir que está recibiendo demasiado sol.

Temperatura :
No tolera el frío intenso, pero le conviene descansar en invierno con temperaturas frescas (6-10ºC). En el invierno, protege al Aloe vera del frío.

Humedad:
Tolera el ambiente seco.

Suelo y sustrato :
El suelo debe ser arenoso y con buen drenaje. Para el cultivo de Aloe vera, es mejor hacerlo en maceta de barro en vez de plástico porque ésta no es porosa. En el fondo echa dos dedos de grava para el drenaje. Espera un par de semanas para empezar a regar, así dará tiempo a cicatrizar las heridas que se hayan podido producir durante el trasplante.

Riego :
Riego escaso. Hay que vigilar que el agua no se estanque. El aloe puede pasar largas temporadas sin agua, sobre todo en invierno. Sin embargo, cuando las hojas están delgadas y arrugadas, significa que tienen sed.

Plagas:
Aloe vera es muy resistente a plagas,suele ser atacado por Pulgones o Cochinillas.

Multiplicación:
Separa los hijuelos que nacen alrededor de la planta madre cuando estos tengan una altura de cuatro dedos. Hay que recordar que no se debe regar durante las 2 primeras semanas después de su transplante para que cicatricen las heridas.Los hijos se le dejan secar sus heridas durante un par de semanas, sin exponerlos al sol, y luego se plantan en macetas individuales.